Especificaciones

Saponificación en frio

Todos nuestros jabones son elaborados a mano con la técnica de saponificación en frío (SEF). El jabón saponificado en frio proviene de un proceso de elaboración simple:

Grasa o aceite + (Hidróxido de sodio + Agua) + Surgras (macerados)

=

Jabón + Glicerina natural + Aceite (no saponificada) + Agua (>10%)

Este método es el único que preserva la glicerina natural en el jabón mejorando la hidratación de la piel y el cabello, proporcionando un efecto protector contra la deshidratación durante 24h.

Saponificación en frío para las pieles más sensibles:

La saponificación en frío consiste en no calentar los aceites vegetales que componen el jabón. Es un método tradicional reconocido por los beneficios que aporta:

  • el jabón conserva los beneficios de los aceites y plantas utilizadas.
  • retiene la glicerina vegetal es, por tanto, más suave y natural que un jabón "clásico" no elimina el manto hidrolipídico que protege naturalmente la piel.

¿Cómo utilizar este jabón solido, pero natural?

Ya sea para un bebé (+2 años), un niño mayor o un adulto, todos pueden utilizar este jabón. Está perfectamente adaptado a las pieles más sensibles, pero también se adapta a todos los demás tipos de piel.


Surgras

Se denomina “surgras” (sobreengrasado) el aceite agregado al jabón al final del proceso de saponificación en frío. El surgras representa el porcentaje de grasa adicional que vendrá hidratar, proteger y controlar el manto hidrolipídico de su piel, permite:

  • Tener jabones más suaves.
  • Beneficiarse de todos los principios activos del aceite.
  • Beneficiarse de todos los principios activos de los macerados de plantas.
  • Proteger la piel de la sequedad.
  • Recuperar elasticidad y confort.
  • Aportar ceramidas.

Se dice que el jabón es surgras porque está especialmente enriquecido con agentes grasos (entre el 5 y el 8%). Además, se conserva toda la glicerina, que es la parte noble e hidratante del jabón, a diferencia de los jabones industriales.

Por ello, nuestros jabones limpian suavemente la piel y dejan una película protectora sobre ella. No contienen agentes irritantes y están hechos a mano en moldes. Ya no tendrá esa sensación de tirantez en la piel, esa necesidad urgente de crema. Por el contrario, la piel se siente cómoda nada más salir de la ducha. Incluso la espuma es más suave y cremosa. La sensación y la experiencia no son las mismas.

Además, este método de fabricación es mucho más respetuoso con el medio ambiente. En nuestros jabones de surgras, no utilizamos grasas animales como la lanolina, a diferencia de los jabones de surgras industriales que se venden en farmacias o tiendas de alimentación.

Para los amantes de la naturaleza, el jabón tiene cero residuos en comparación con las botellas de plástico de los geles de ducha.

Es un producto de cuidado biodegradable que no deja rastros en el agua de aclarado, a diferencia de los productos industriales.


Materia prima, aceite y macerados

Jardines de Amelia se compromete en ofrecer productos 100% naturales para pieles normales, sensibles y dañadas sin: grasa animal, químicos, aditivos artificiales, parabenos, silicona, parafina, fragancia, colorantes sintéticos, OGM, conservantes, aceite de palma, gluten, aceites esenciales…

Nuestros ingredientes de origen 100% vegetal son de alta calidad con el fin de dar un máximo de beneficios a su piel, limitando irritaciones y alergias:

  • Plantas secas: Laurel, Tomillo, Lavanda, Coca, Menta, Cipres, Romero, Curcuma, Tomate, Canela, etc...
  • Aceite vegetal:Aceite de oliva virgen extra de primera presión en frío.
  • Ingrediente superengrasante: 6-8% Macerado oleoso de plantas secas.

Todos nuestros jabones son elaborados en el mismo aceite de oliva extra virgen de primera presión en frío y de macerados (en la misma aceite de oliva) de plantas con propiedades estudiadas y reconocidas.

Tiempo de maceración: 2 - 3 meses.


¿Por qué 100% aceite de oliva?

Rico en ácidos grasos, el aceite de oliva contiene más del 60% de ácido oleico, que es un omega 9.

Contiene ácido linoleico, un omega 6 indispensable para la salud de la piel y el cabello, y ácido palmítico, protector de la barrera cutánea. Este aceite aporta antioxidantes (vitamina E, escualenos y compuestos fenólicos) así como fitoesteroles, que calman las inflamaciones y favorecen la regeneración de las células con ceramidas.

Los beneficios para el cabello

El aceite de oliva es ideal a la hora de utilizarlo como producto para el cuidado del cabello. Muy rico en antioxidantes (moléculas que protegen al organismo de muchas enfermedades), se recomienda para mantener el cabello brillante y en excelente estado.

Si le resulta difícil peinarse porque su cabello se enreda con frecuencia, está seco o dañado, el aceite de oliva puede ser la solución ideal. Uno de los beneficios del aceite de oliva para el cabello son sus propiedades hidratantes y reparadoras. Los tratamientos basados en este ingrediente nutren el cuero cabelludo en profundidad.

Virtudes para el rostro

El aceite de oliva tiene muchos beneficios para el rostro. Es útil para prevenir los signos de envejecimiento de la piel, como las arrugas. Contiene muchas vitaminas (A, D, E y K), todas ellas buenas para la piel. Aplicando nuestros productos de cuidado de la piel en el rostro, hidratará su piel en profundidad, a la vez que la tonificará y protegerá.

Otro beneficio del aceite de oliva es que elimina las células muertas de la piel. Su piel será más flexible. Si tiene problemas de piel seca, el aceite de oliva es exactamente lo que necesita. Al limpiarse el cuerpo, cara o manos con nuestros productos de cuidado, estarán más hidratadas y, por tanto, más suaves.